Sostenibilidad

Economía circular y envases sostenibles

Hoy en día existe un movimiento masivo hacia una mayor sostenibilidad en el mundo de los envases, sobre todo para evitar que los residuos de envases acaben en el mar o en un vertedero [1].

Sin embargo, el embalaje como tal es esencial para mantener sus productos frescos, protegidos y fáciles de transportar. ¿Sabía que un producto con un embalaje insuficiente tiene un mayor impacto medioambiental que un producto con más embalaje [2]?

Así que el envase es importante, pero ¿cómo combatir los residuos de envases y hacerlos más sostenibles? La pregunta es clara, pero la respuesta requiera matices.

 

Economía circular

Nuestro punto de partida es el “modelo de economía circular”, que pretende convertir los residuos de hoy en las materias primas de mañana. Esto significa no sólo devolver las materias primas al ciclo, por ejemplo, mediante el reciclaje o el compostaje, sino también minimizar la huella ecológica en cada fase del proceso: desde el diseño óptimo de un producto, pasando por su producción y uso eficientes, hasta el final de su vida.

Embalaje sostenible

Aplicado al mundo de los envases, este principio de circularidad significa que tenemos que aprender a “envasar de forma sostenible“. Pero, ¿qué significa esto exactamente?

Un envase sostenible significa “abastecerse”, fabricar y utilizar envases con el menor impacto y huella medioambiental posible  [3]. En otras palabras, los envases son respetuosos con el medio ambiente si no contribuyen al agotamiento de los recursos naturales.

En el contexto de la economía circular y los envases sostenibles, se puede conseguir un beneficio medioambiental de diferentes maneras: adaptando el envase al producto, optimizando la logística, utilizando menos energía en la producción o aumentando la reciclabilidad o el uso de materias primas renovables [4].

 

Envases ecológicos (de origen)

Se puede dar un paso más en cuanto a la sostenibilidad de los envases y optar por los envases ecológicos (de origen). Los envases ecológicos se fabrican con materias primas renovables y/o biodegradables [5].

Las materias primas renovables son inagotables, se regeneran y pueden utilizarse indefinidamente [6]. Su uso es respetuoso con el medio ambiente en el sentido de que no contribuye al agotamiento de las materias primas naturales.

 

Existen varias categorías de materias primas renovables. En Baginco, optamos por el uso de la madera y los biorresiduos.

El material que se ha utilizado durante más tiempo es la madera, de la que se obtiene el papel como subproducto y que naturalmente utilizamos para fabricar nuestros envases.

A veces también se habla de materias primas vegetales renovables, que incluyen la madera y el bambú, pero también, por ejemplo, el maíz, la caña de azúcar, las patatas, etc. Sin embargo, en Baginco preferimos no utilizar estas materias primas, ya que están destinadas al consumo humano y no queremos fomentar su uso en los envases.

Los biorresiduos son otra categoría. Son los residuos que quedan después de separar todos los residuos reutilizables o reciclables de la fracción principal. Un ejemplo es el papel fabricado con residuos agrícolas. Encontrará más detalles al respecto en la sección “Materias primas”.

En resumen

En Baginco, nos esforzamos por innovar y ofrecer a nuestros clientes una solución en cada etapa del proceso, desde la materia prima hasta los residuos. Sin embargo, en este mundo cambiante hay que tener en cuenta el contexto actual. Para conocer los detalles de cada etapa del proceso, vaya a: